¿Con qué comparó Jesús el reino de los cielos?
“Sucede también con el reino de los cielos como con un comerciante que andaba buscando perlas finas; cuando encontró una de mucho valor, fue y vendió todo lo que tenía, y compró esa perla” (Mateo 13:45, 46).
Marca la respuesta correcta
- Con una perla de mucho valor.
- Con una semilla de mostaza.
- Con la cizaña.
¿Has visto alguna vez una perla?
Son realmente hermosas. Las hay de diferentes tamaños, formas y colores, pero todas las perlas son piedras preciosas que se han formado dentro de las ostras que viven en el mar.
¿Pero cómo se puede formar algo tan hermoso dentro de una ostra de apariencia tan fea? Eso es algo que solo nuestro Creador puede hacer.
Sucede de la siguiente forma… A veces, un granito de arena se mete dentro de la concha de una ostra, y el animal lo va recubriendo con una mezcla de cristales de carbonato de calcio (CaCO3) y una proteína llamada “conchiolina”, formando una sustancia conocida como “nácar”, que es la sustancia que recubre las paredes interiores de las ostras.
¿Y sabes cuánto tarda un granito de arena en convertirse en una perla? Por lo menos diez años, y si un pescador encuentra una puede hacerse rico.
¡Qué maravilloso es nuestro Creador, que es capaz de transformar un granito de arena en una perla preciosa!
Aunque a veces creas que eres solo como un granito de arena insignificante y sin valor… recuerda que si te pones en las manos del Creador puedes convertirte en una “perla” de gran valor. Solo tienes que desearlo y con la ayuda de Jesús puedes llegar a ser una persona muy valiosa para Dios y para la humanidad.
Además, como dice la Biblia, Jesús y su reino es como una perla de gran valor. Cuando alguien lo encuentra lo deja todo por él, así como dice el versículo de hoy, pues ¡no hay nada más valioso que conocer a Jesús, nuestro Salvador!
Dibuja una perla en tu Diario de Oración y pídele a Jesús que te ayude a ser una persona valiosa para todos los que te conocen.