Desde antes de nacer
«Antes que te formara en el vientre, te conocí, y antes que nacieras, te santifiqué, te di por profeta a las naciones». Jeremías 1: 5 RV95
Uno de los principales desafíos que enfrentan muchos jóvenes de hoy es la baja autoestima. Muy a menudo he conocido jóvenes y señoritas que se desprecian a sí mismos, piensan cosas negativas de sí mismos o se sienten inferiores. Si los demás muestran rechazo, se desmoronan y con tal de agradar a sus compañeros hacen lo que sea, incluso si va en contra de sus gustos.
Hoy deseo que sepas que Dios te ama tal y como eres, que él te acepta y su aceptación vale más que todos los aplausos que otros puedan darte. Las palabras que el Señor le dirigió a Jeremías se aplican a ti también hoy: «Te escogí desde antes de nacer». Así es, tu vida no es un accidente, no eres un error, antes de que nacieras, tu vida ya tenía un propósito en la mente divina.
Piensa en esto: de los 80 a 300 millones de espermatozoides que son depositados en una mujer durante la relación sexual, solo un millón, aproximadamente, llegan al fondo del útero y unos 10,000 a la parte distal de las trompas de Falopio. El espermatozoide necesita unos mil movimientos de cola para avanzar un centímetro. Si la distancia que existe entre el cuello del útero y el final de las trompas de Falopio es de 18-20 cm, el espermatozoide necesitará unos 20,000 movimientos de cola para llegar a su destino. La velocidad del espermatozoide es increíble, aproximadamente un centímetro por hora, especialmente cuando consideramos que su tamaño es menor que el de un glóbulo rojo. A esta velocidad, le puede tomar hasta tres días llegar al óvulo. Los otros espermatozoides, que no llegan a su destino o que llegan tarde, simplemente mueren.
¿Ahora lo entiendes? ¡Tú eres un ganador! Ese espermatozoide que llegó a su destino eres tú, con tus defectos y virtudes, pero eres tú. Dios te escogió desde antes de nacer. Él conoce todo sobre ti: tus pensamientos, tus luchas, tus sueños y anhelos. Él conoce tanto lo bueno como lo malo y aún así te ama. No olvides que Dios está contento contigo. Es mucho más provechoso pensar en la forma en que Dios te ve que torturarte tratando de descifrar lo que otros piensan de ti. Hoy @Dios te dice: «Yo te escogí desde antes de nacer. Te conozco mejor que nadie y te amo. Nunca lo olvides».
