Márgenes
“Sigan por el camino que el Señor su Dios les ha trazado, para que vivan, prosperen y disfruten de larga vida en la tierra que van a poseer” (Deuteronomio 5:33, NVI).
¿Recuerdas cuando empezaste a pintar? Si fuiste como mi creativa hija pequeña, seguramente coloreaste la página entera sin mantenerte dentro de los márgenes y usaste todos los colores que tenías a tu alcance. Aunque mi chiquita le ponía empeño, sus cuadros lucían más como algo abstracto que como algo definido. No había márgenes y los colores que elegía estaban de acuerdo con su imaginación, no con la realidad. ¿Alguna vez viste una vaca roja o morada? Pues en sus pinturas sí las había. Mientras ella iba creciendo, sus dibujos iban tomando forma. Sus pinturas se comenzaron a mantener dentro de los márgenes y los colores que combinaban mejor con la realidad.
Esto se parece un poco a la forma en que algunas personas quieren vivir su vida. Viven saliéndose de los márgenes, sin darse cuenta de que sus gustos e imaginación no son suficientes para vivir una vida plena. En el despliegue de la creatividad, los márgenes pueden no ser muy importantes cuando eres pequeña, pero a la hora de vivir la realidad, sí.
¿Qué son los márgenes? Son los límites. Por ejemplo, los márgenes de un río son las orillas. Si el río se sale del límite de las orillas, estaremos en problemas, las aguas pueden producir mucha destrucción.
En la escritura, un margen es el borde del contenido principal. Si el texto se sale del borde, estaremos en problemas; nunca sabremos dónde comienza y dónde termina el texto, y no entenderemos lo que está escrito.
También se usan márgenes para el tiempo. Si nos pasamos del límite de la hora, estaremos en problemas; podemos llegar tarde al aeropuerto, perder el avión y así privarnos de nuestras soñadas vacaciones.
Los niños cristianos también tienen márgenes, esos límites están en la Palabra de Dios, y la obediencia es la disposición de vivir dentro de los límites establecidos. Cuanto antes aprendas la importancia de obedecer esos límites, más feliz serás. Si no los obedeces, estarás en problemas…
Una vida sin Dios es una vida sin márgenes, y una vida sin márgenes es una vida sin sentido. ¡Una vida sin sentido no es vida! Obedece los límites y vivirás una larga vida por la eternidad, al lado de los que más amas.
Magaly