Actualiza tu valor
“Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener” (Romanos 12:3).
Según Maxwell Maltz, “la autoestima baja es como conducir por la vida con el freno de mano puesto”. Por su parte, Malcolm S. Forbes dijo: “Hay demasiadas personas que sobrevaloran lo que no son y subestiman lo que son”. Algunas personas se subvalúan, se consideran debajo de su valor, mientras que otras se sobrevalúan, se ponen un precio mayor del que tienen. ¿Cuál es el punto saludable?
El cuerpo humano contiene oxígeno, carbono, hidrógeno, nitrógeno, fósforo, calcio, potasio, azufre, sodio, cloro, magnesio y cantidades minúsculas de otros elementos. ¿Cuál sería el valor económico de los elementos químicos básicos que componen el cuerpo humano? Pocas monedas. ¿Cuál sería el costo de las estructuras más complejas formadas a partir de los elementos básicos, tales como como ADN, las proteínas, los anticuerpos? Miles de monedas. ¿Cuál sería el costo de órganos vitales, tales como corazón, pulmones, riñones, medula? Millones de monedas.
En tanto lo hagamos con cordura, es decir, con sabiduría, debemos reconocer nuestras virtudes, defectos, fortalezas y debilidades.
Pablo, además, agrega un detalle: todo es según la medida de fe. La naturaleza pecaminosa se estima según los valores del mundo; cada uno vale por lo que tiene. En contraste, para los que son dependientes de Dios, cuanto más grande es su fe más valiosos se vuelven; pero saben reconocer que es en virtud del amor de Dios. Nunca podemos estar orgullosos de nuestra humildad, porque no sería verdadera humildad.
¿Qué imagen o concepto tenemos de nosotros? ¿Idealizado, ficticio o impostado? Algunos intentan mostrarse en las redes sociales como les gustaría ser, no como son. Si la autoimagen coincide con la realidad, entonces tendremos una personalidad sana; si no, esa incoherencia terminará enfermando y destruyendo todo.
Nada te coloca en verdadera perspectiva como aceptar y agradecer que fuiste redimido por el sacrificio de Cristo. Eres tan indigno que él tuvo que morir. Eres tan digno que lo habría hecho solo por ti. Actualiza tu valor.