Cambio radical
“Por tu amor, oh Dios, ten compasión de mí; por tu gran ternura, borra mis culpas” (Salmo 51:1).
“El encargado de la fiesta probó el agua convertida en vino, sin saber de dónde había salido; solo los sirvientes lo sabían, pues ellos habían sacado el agua” (Juan 2:9).
¿Alguna vez has escuchado la expresión “transformar el agua en vino”? Mucha gente dice esto para indicar que algo ha sufrido un cambio importante. Lo que no todos saben es que esta frase es parte del primer milagro de Jesús, descrito en la Biblia, en el libro de Juan. Todo sucedió en una fiesta de bodas, cuando se acabó el vino. Entonces, Jesús ordenó a los encargados que llenaran las vasijas con agua y sirvieran a los invitados. ¿El resultado? El agua se había convertido en vino (jugo de uva puro). ¡Qué cambio! Como puedes imaginar, las personas que estaban en esa fiesta estaban muy sorprendidas.
Este es solo un ejemplo de los milagros que Dios puede hacer. Nada es imposible para él, y no hay barreras que él no pueda superar. ¿Hay algo en tu vida que te gustaría cambiar por completo? ¡Él puede hacerlo!
Puedes pasar por un cambio completo. Solo haz lo que el Señor te pida que hagas. Aunque parezca imposible que el agua se convierta en vino, llena las tinajas si él lo manda. Tu parte es creer, y lo demás… ¡déjaselo a él!
