Solo amor
“Así hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor, y el que vive en el amor, vive en Dios y Dios en él” (1 Juan 4:16).
¿Tienes (o has tenido alguna vez) una mascota? Trata de recordar el día en que llegó a tu casa. ¿Era todavía un cachorro, lloraba todas las noches, orinaba en el lugar equivocado, y ni siquiera podía sentarse solo en el sofá? ¿O ya estaba más grande, lleno de energía y con ganas de jugar? De una forma u otra, ciertamente te alegraste mucho cuando esa mascota llegó a ser tuya.
¿Cómo es posible sentir tanto cariño, protección y amor por un animalito que acabas de conocer? ¿Alguna vez te has preguntado esto? Solo podemos tener sentimientos como estos porque fuimos creados a imagen y semejanza de Dios (Génesis 1:27) y, por lo tanto, hay algo bueno en nosotros, como lo que sentimos por los animales, libremente.
Este sentimiento es un pequeño reflejo de lo que Dios siente por nosotros. Él es el verdadero significado de la palabra “amor”.