
Una obra de arte
«Pues Dios es el Rey de toda la tierra. Alábenlo con un salmo». Salmo 47:7
Me gustaría tener la capacidad de pintar cuadros hermosos. Los colgaría en la pared, los regalaría a mis familiares y amigos. Pero… no tengo ese talento. Cada persona tiene su don y me parece muy bonito verlas habilidades de quienes son artistas.
Hubo un artista en especial que fue más talentoso que lo común. Sus trazos eran delicados, y así, los paisajes aparecían en la tela. Elegí los colores con cuidado. Las obras de arte hacían que la galería se pusiera más bonita. Lo más sorprendente, sin embargo, era el artista. Tomó el pincel con la boca y se dispuso a terminar el árbol del lado derecho con pinceladas verdes. Había sufrido un accidente de joven y aunque ya no tenían más las manos, no desistió