El mundo necesita un Médico
«Te ruego, Dios, que la sanes ahora» Números 12: 13, RV95
La definición más clara de enfermedad es la siguiente: «Alteración leve o grave del funcionamiento normal de un organismo o de alguna de sus partes debida a una causa interna o externa. Cosa que perturba o daña a una persona en lo moral o en lo espiritual y que es difícil de combatir o eliminar». Según esta definición se puede estar enfermo física, emocional y espiritualmente.
Para la OMS, el concepto de salud es el siguiente: «La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades». A esta definición breve y concisa se le puede añadir el aspecto espiritual. Lo importante de esta definición es que deja atrás la idea de la salud como la simple ausencia de enfermedades. Cuando sumamos la definición de enfermedad al concepto amplio de salud, nos damos cuenta de que cada día más nuestro mundo necesita un Médico que nos sane por completo.
Hoy en día hay una tasa muy elevada de mortalidad infantil, el VIH continúa matando a millones de personas, y las enfermedades no transmisibles son un peligro latente en aumento para la población adulta. Además, las enfermedades cardiovasculares, el consumo de tabaco y los peligros del tráfico vehicular en las ciudades se cobran la vida de millones de adultos cada año. En el campo de lo espiritual la situación no es mejor. A pesar del desarrollo tecnológico y de la era de la comunicación existe en el mundo una crisis impresionante en cuanto a la ética y los valores. Con la facilitación de la comunicación ha aumentado la confusión espiritual de los seres humanos.
Frente a estas cifras y datos creo que nuestra mejor opción es hacer nuestro el ruego que Moisés elevó ante Dios con respecto a María, su hermana, y pedirle que nos sane física, social, mental y espiritualmente. El mundo necesita desesperadamente un Médico, un sanador, un restaurador, necesita a Alguien que se ocupe de las enfermedades de toda índole que afectan a la humanidad.
Nuestro mundo necesita a @Dios. ¿Y tú? ¿Necesitas de alguien que te sane en los aspectos que hemos mencionado? Hoy puedes acudir al Señor y pedirle sanidad. Te aseguro que obtendrás los mejores resultados.