La imagen propia
“Señor, tú me has examinado y me conoces” (Sal. 139:1).
A Ray le encanta el baloncesto y el fútbol, y es bastante bueno en tenis (y tiene excelentes abdominales que lo demuestran). No lo piensa dos veces para quitarse la camiseta en cualquier ocasión en que le parezca apropiado hacerlo.
A Daniela la acaban de invitar a una fiesta en la piscina de Ramona. Ella se siente muy segura con lindos atuendos que ocultan la mayoría de sus supuestos defectos, pero la última vez que trató de comprar un traje de baño, todos los que se ponía la hacían sentir como un fenómeno de la naturaleza.
A Tailor no le gusta exponerse en público, pero por alguna razón uno de los profesores de música de la escuela dice que tiene una gran voz. Tailor a veces le canta a su novia cuando están solos, pero ¿frente a cientos de personas? Ni pensarlo.
Todo el mundo sabe cuán buena estudiante es Laura. La gente piensa que a ella lo único que le interesa son sus buenas calificaciones y mostrar cuánto sabe, pero en realidad lo que ella quiere es que la gente vea su verdadera esencia.
Estamos hablando de la imagen propia. La forma en que nos vemos a nosotros mismos moldea cómo nos ven los demás, aunque no siempre es así.
- ¿Cómo te describirías?
- ¿Cómo crees que los demás te describirían?
- ¿Cómo te gustaría que te vieran los demás?
- ¿Qué rasgos admiras de otras personas?
- ¿Cómo crees que te ve Dios?
