Matutina para Adolescentes | Miércoles 22 de Enero de 2025 | Experimenta el gozo

Matutina para Adolescentes | Miércoles 22 de Enero de 2025 | Experimenta el gozo

Experimenta el gozo

“Prueben y vean que el Señor es bueno; dichosos los que se refugian en él” (Salmo 34:8).

Imagina un día soleado en la playa. Estás frente al mar; la brisa acaricia tu rostro y el sonido de las olas llena tus oídos. En tu mano tienes una deliciosa paleta de helado de tu sabor favorito. Apenas das el primer mordisco, sientes que una explosión de sabores llena tu boca y no puedes evitar sonreír. Esa paleta es tan buena que te hace sentir feliz, ¿verdad? Así es como Dios quiere que experimentemos su bondad y gozo en nuestra vida.

La Biblia nos dice en el Salmo 34:8: “Prueben y vean que el Señor es bueno; dichosos los que en él se refugian”. Este versículo es un recordatorio poderoso de que la bondad de Dios es real y está disponible para cada uno de nosotros, especialmente en los momentos difíciles de la vida.

A veces la vida puede ser como una tormenta que parece no tener fin, pero cuando buscamos refugio en Dios, encontramos su paz y gozo, que superan cualquier circunstancia. Así como el helado nos hace felices en un día caluroso, Dios quiere llenar nuestro corazón con su gozo en medio de nuestras luchas y desafíos.

¿Cómo podemos “probar” la bondad de Dios? A través de la oración, la lectura de la Biblia y la comunión con otros creyentes. Cuando pasamos tiempo en su presencia, descubrimos su amor incondicional, su gracia abundante y su fidelidad constante. Y cuando experimentamos estas cosas, nuestro corazón se llena de gozo.

Ora para que Dios te muestre su bondad cada día. Pídele que te ayude a ver sus bendiciones incluso en medio de las dificultades. Recuerda que no importa lo que estés enfrentando, Dios es tu refugio y tu fuente de gozo.

El Salmo 34:8 nos invita a probar y ver la bondad del Señor, a refugiamos en él y experimentar su gozo. Así como disfrutamos de un delicioso helado en un día soleado, podemos encontrar un gozo duradero en Dios, independientemente de nuestras circunstancias.

Oración: Te agradezco, mi Dios, por tu bondad que nunca falla. Ayúdame a experimentar tu gozo en medio de las pruebas de la vida.

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