Increíble Gracia
“Todos han pecado y están lejos de la presencia gloriosa de Dios. Pero Dios, en su bondad y gratuitamente, los hace justos, mediante la liberación que realizó Cristo Jesús” (Romanos 3:23, 24).
Imagina que sacaste una mala nota en el examen. A su vez, tu amigo de al lado respondió correctamente todas las preguntas y obtuvo la máxima calificación. Cuando el maestro está escribiendo las calificaciones, tu amigo intercede por ti:
“Profesor, quiero intercambiar mi prueba. Ponga la nota baja en mi nombre y le doy el sobresaliente a mi amigo”.
Increíble, ¿no? ¡Sin merecerlo, obtuviste una gran calificación! Y tu amigo, sin necesidad, tomó la nota baja en tu lugar. Por supuesto que eso no sucede, porque ningún maestro permitiría tal cosa, pero en cuanto a nuestra salvación, sucedió algo así.
Somos pecadores, hacemos cosas malas, pero Dios escogió salvarnos. Envió a Jesús a morir en la cruz y así pagar por los pecados de toda la humanidad. Es mediante este sacrificio que tenemos la oportunidad de la salvación. ¿Cuánto pagamos por ello? ¡Nada! Jesús pagó nuestra deuda tomando nuestro lugar. ¡Eso es gracia!
Lee el versículo de hoy una vez más y subraya la palabra “gratuitamente”. Nunca olvides este regalo dado por Dios.
“Porque ha sido revelado el generoso amor de Dios que trae salvación para todos” (Tito 2:11, PDT).
