Sean bienvenidos
“Y dirá el Rey a los que estén a su derecha: ‘Vengan ustedes, los que han sido bendecidos por mi Padre; reciban el reino que está preparado para ustedes desde que Dios hizo el mundo’ ” (Mateo 25:34).
Imagina la expectativa por un visitante que llegará a tu casa. Piensa en alguien a quien amas y con quien realmente quieres estar cerca. Después de preparar la casa, el lugar donde dormirá la persona y todo lo que harán juntos, todavía tienes que esperar. Esperas y esperas mucho tiempo. Después de la larga espera, finalmente suena el timbre. ¡Llegó! ¡Qué alegría!
Ahora, piensa en cómo Jesús recibirá a sus hijos en el cielo. Cuando abra las puertas de perlas de la Ciudad Santa, él te dará la bienvenida. Su gozo será infinito, al ver a sus hijos, rescatados de todo mal, preparados para la vida eterna. ¡Qué alegría sentirá al ver que todo el sufrimiento por el que pasó Jesús ha traído salvación al pecador! Todos los salvos compartirán la felicidad del Señor. Alrededor de un gran Trono, sentirás una alegría indescriptible. Todos colocarán sus coronas a los pies de Jesús y lo alabarán.
El Reino de Dios está listo para recibirte. Nuestro Rey espera con ansias ese día. ¿Estás listo para ir?