Matutina para Jóvenes | Domingo 29 de Diciembre de 2024 | Refugio en Dios

Matutina para Jóvenes | Domingo 29 de Diciembre de 2024 | Refugio en Dios

Refugio en Dios

«El que vive bajo la sombra protectora del Altísimo y Todopoderoso, dice al Señor: “Tú eres mi refugio, mi castillo, ¡mi Dios, en quien confío!”» (Salmo 91: 1-2).

¿Sabías que Charles Wesley escribió más de seis mil himnos? Durante más de doscientos años, estos himnos han sido una fuente de consuelo y aliento para los cristianos. Sin embargo, es posible que no conozcas un aspecto interesante sobre este hombre piadoso: también experimentó momentos de desánimo.

Un día, mientras Wesley se encontraba junto a su escritorio, sumido en la tristeza por sus problemas, un pajarito voló a través de la ventana abierta y chocó con su pecho, buscando refugio en el interior de su saco. Wesley notó que el corazón del pajarito latía con rapidez, de modo que lo cubrió con la mano. Luego se asomó a la ventana para descubrir la razón por la que la avecilla sentía temor, y vio a un halcón que volaba en círculos.

Mientras Wesley protegía al pajarito junto a su pecho, reflexionó sobre su propia experiencia y comprendió que él también podía encontrar refugio en Dios. Fue en ese momento que escribió las siguientes palabras:

«Cariñoso Salvador, huyo de la tempestad

a tu seno protector, fiándome de tu bondad.

Sálvame, Señor Jesús, de las olas del turbión;

hasta el puerto de salud guía tú mi embarcación».

Así como el pajarito encontró refugio en Wesley, nosotros podemos encontrar refugio en Dios. Él «es nuestro refugio y nuestra fuerza; nuestra ayuda en momentos de angustia» (Salmo 46: 1). Nos ama con amor eterno y nos consuela con su gracia y misericordia (ver Jeremías 31: 3; 2 Corintios 1: 3-4). No nos deja ni nos desampara, sino que está con nosotros en todo momento (ver Hebreos 13: 5; Mateo 28: 20).

¿Qué situaciones o circunstancias te hacen sentir temor o desánimo? ¿Cómo puedes buscar refugio en Dios y confiar en su bondad y protección? Cuando sientas temor o desánimo, acércate a Dios y hallarás refugio y paz en su amor. «Que el Señor te bendiga y te proteja; que el Señor te mire con agrado y te muestre su bondad; que el Señor te mire con amor y te conceda la paz» (Números 6: 24-26).

Deja una respuesta