Matutina para Jóvenes | Lunes 1 de diciembre de 2025 | Termina la carrera

Matutina para Jóvenes | Lunes 1 de diciembre de 2025 | Termina la carrera

Matutina para Jóvenes

«He terminado la carrera y he permanecido fiel» (2 Tim. 4:7, NTV)

Lance Armstrong nació en Texas, Estados Unidos, el 18 de septiembre de 1971. Desde muy joven se destacó por su talento en el ciclismo. Ganó numerosas carreras a finales de la década de 1980 y principios de la

década de 1990. Sin embargo, con apenas 25 años le detectaron cáncer testicular y tuvo que someterse a numerosos tratamientos. ¿Te imaginas lo duro que debió haber sido? No obstante, en 1998, y ya recuperado, regresó con gran ímpetu a las carreras y de 1999 a 2005 ganó el Tour de Francia, la carrera de ciclismo más importante del mundo, ¡siete veces consecutivas! Además de obtener una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos Sídney 2000

Sin embargo, todos los éxitos de Armstrong se derrumbaron como un castillo de naipes cuando se comprobó que se había dopado para mejorar su rendimiento. Como resultado, se anularon todas sus victorias a partir

del 1 de agosto de 1998. Eso incluyó sus siete victorias al Tour de Francia; también tuvo que devolver la medalla de bronce y el diploma olímpico. Hoy, Lance Armstrong es una vergüenza para el deporte. Comenzó bien, pero no pudo terminar la carrera de su vida.

Historias como las de Armstrong me recuerdan que, muchas veces, lo más importante no es cómo comenzamos, sino cómo terminamos nuestras carreras. Tomemos como ejemplo al apóstol Pablo. Comenzó su carrera como discípulo de Gamaliel y perseguidor de la iglesia. Además, él mismo confiesa que fue «blasfemo, perseguidor e injuriador» (1 Tim. 1:13). Sin embargo, al final de su vida pudo decir con la frente en alto: «He llegado al término de la carrera, me he mantenido fiel. Ahora me espera la corona merecida que el Señor, el Juez justo, me dará en aquel día» (2 Tim. 4:7-8).

Estoy seguro de que para más de un lector este año ha traído grandes victorias y quizás para otros trajo pruebas y caídas. Pero ya el pasado no importa. La pregunta que hemos de hacernos en este día es: ¿Cómo voy a terminar este año? ¿Acabaré esta carrera de 365 días con la frente en alto o derrotado? Todavía estás a tiempo de levantarte, darle un giro a tu vida y finalizar este año como un gran campeón. ¡Ánimo! ¡Termina bien la carrera!

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