Vasijas de honra
«En una casa grande no solo hay vasos de oro y de plata, sino también de madera y de barro, unos para los usos más nobles y otros para los usos más bajos» (2 Timoteo 2: 20, NVI).
¿Te has fijado en las diferentes vasijas que hay en una casa? Algunas son de plástico, otras de metal y otras de cerámica. Algunas son para cocinar y otras se usan como parte de la decoración. La Biblia nos dice que nosotros somos como vasijas en la casa de Dios. Él nos ha creado con diferentes formas, tamaños, colores y capacidades. Nos ha dado diferentes propósitos, funciones y dones. Pero no todas las vasijas son iguales ante Dios. Hay unas que son de honra y otras que tienen un uso común.
Entonces, ¿qué hace la diferencia entre unas y otras? La respuesta está en nuestro texto bíblico de hoy: «En una casa grande no solo hay vasos de oro y de plata, sino también de madera y de barro, unos para los usos más nobles y otros para los usos más bajos. Si alguien se mantiene limpio, llegará a ser un vaso noble, santificado, útil para el Señor y preparado para toda obra buena» (2 Timoteo 2: 20-21, NVI).
La diferencia está en la limpieza. La limpieza espiritual consiste en apartarnos del pecado, del egoísmo y de la mundanalidad, y en acercarnos a Dios en obediencia, sumisión y santidad. Solo así podremos ser vasijas dignas de su presencia y de su gloria, que bendigan a otros con su amor y su verdad. En última instancia, lo que define nuestro uso no son nuestros talentos o carisma, simbolizados por el oro o la plata, sino de lo que estamos llenos: del Santo Espíritu de Dios.
Y tú, ¿qué tipo de vasija eres en la casa de Dios? ¿Qué necesitas limpiar o cambiar en tu vida para ser una vasija de honra? ¿Cómo puedes ser una vasija que sirva a Dios y a los demás con amor y humildad?
Dios quiere limpiarte y santificarte por medio de su Palabra y de su Espíritu. Él te invita a ser un instrumento útil para su obra. No te conformes con ser una vasija más en la casa de Dios, aspira a ser una vasija de honra que refleje su belleza, su bondad y su poder.