Una tarea inmensa
“Yo soy quien te manda que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes porque yo, tu Señor y Dios, estaré contigo dondequiera que vayas” (Josué 1:9).
¿Recuerdas la historia de Moisés, el bebé que fue puesto en una canasta en el río y más tarde encontrado por la hija de Faraón? Incluso de adulto, Dios continuó haciendo muchas cosas buenas en su vida. Moisés fue obediente al Señor y guio al pueblo en el largo viaje a través del desierto hasta Canaán.
Después de la muerte de Moisés, quien dirigió al pueblo fue Josué. ¡Qué gran responsabilidad para un joven que había visto a Dios obrar tantos milagros en manos del gran líder!
Dios ordenó a Josué que preparara al pueblo para cruzar el río Jordán y entrar en la Tierra Prometida. Esta fue una tarea muy importante. Pero con ese mandato, Dios hizo una declaración motivadora. Estas mismas palabras se aplican a los grandes desafíos en tu vida. No importa qué tarea tienes que hacer hoy o cuán difícil es tu problema; el mismo Dios que cuidó de Moisés y de Josué está listo para ayudarte también. Todo lo que tienes que hacer es confiar en las hermosas promesas que hizo.
¿Cuál es tu gran desafío hoy? Antes de hacer cualquier otra cosa, conversa con Dios y pídele que esté contigo.
