Martes 19 de Abril de 2022 | Matutina para Menores | Sazonando palabras

Martes 19 de Abril de 2022 | Matutina para Menores | Sazonando palabras

Sazonando palabras

“Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno” (Colosenses 4:6).

¿Has escuchado a un loro hablar? Puede ser que sí; pero ¿has podido conversar con alguno de ellos? Seguro que no. El habla es un acto de inteligencia que Dios les dio a los seres humanos para comunicarse. Los loros no hablan, solo imitan los sonidos. Existen algunas especies de loros que pueden reproducir sonidos humanos mejor que otras, pero no tienen ninguna comprensión de lo que dicen, ni sus palabras tienen ningún significado para ellos; son sonidos sin gracia y sin sazón, sin amor y comprensión.

A diferencia de los loros, a través de las palabras tú puedes comprender y ser comprendido, puedes expresar tus sentimientos, emociones, ideas, opiniones, necesidades y deseos. Pero tus palabras deben pronunciarse con gracia, y estar sazonadas con sal. ¿Cómo le pongo sal a mis palabras? Hablando con consideración y respeto.

¿Te comerías la comida sin nada de sal? En uno de nuestros viajes familiares visitamos a unos amigos queridos. Ellos estaban pasando por un importante cambio en su alimentación, y digo importante porque cuando nos enteramos de esta decisión era demasiado tarde. Estábamos sentados frente a la mesa listos para comer, intentando tragar cada bocado de esa desabrida comida.

Para nosotros, esa comida sí que estaba sin gusto, ¡era incomible! ¿Exagero? Pues intenta comer y disfrutar una comida sin absolutamente nada de sal y me darás la razón. Por favor, ¡tus palabras deben ser sazonadas, deben ser gustosas!

Dios dijo que somos la sal del mundo. El respeto y la consideración son como esa sal que sazona las palabras. La Biblia dice: “Sean, pues, aceptables ante ti mis palabras y mis pensamientos, oh Señor, roca mía y redentor mío” (Sal. 19:14).

Asegurémonos de que nuestras palabras sean agradables a Dios y así serán siempre agradables a nuestro prójimo. ¿Cómo son tus palabras? ¿Como las del loro, que imita sin sentido? ¿Como la desabrida comida de mis amigos? ¿O son respetuosas, amables, agradables, gustosas y sazonadas con sal?

Magaly

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