Viernes 07 de Octubre de 2022 | Matutina para Adolescentes | El peor incendio en la historia de los Estados Unidos

Viernes 07 de Octubre de 2022 | Matutina para Adolescentes | El peor incendio en la historia de los Estados Unidos

El peor incendio en la historia de los Estados Unidos

“Y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del hombre” (Mateo 24:39, RVR 95).

Temperaturas tan calientes que te producen ampollas. Vientos como los de un horno ardiente. Las llamas se precipitan hacia ti. Contienes la respiración hasta que te desesperas por respirar. Cuando por fin lo haces, el aire te abrasa la tráquea y los pulmones, y caes al suelo con apenas unos segundos de vida. La fecha: 7 de octubre de 1871. El lugar: Wisconsin. Las condiciones: ambiente extremadamente seco. Los árboles habían dejado caer sus hojas. Los pantanos y las turberas se habían secado. Estallaban incendios por todas partes.

Nadie sabe dónde empezó el fuego. Tal vez en el denso bosque de Wisconsin o en los lechos de turba secos como la yesca. Primero, se extendió a la pequeña aldea de Sugar Bush, donde murieron todos los residentes. Un incendio de este tipo crea sus propios vientos huracanados, y este envió llamas de 60 metros de altura rugiendo a través de los bosques donde los árboles explotaron al ser arrasados por lenguas de fuego de 1.100 ºC de temperatura. ­Peshtigo, con todos sus edificios hechos de madera, fue lo siguiente en su camino. El fuego tardó 24 horas en llegar pero, por la falta de comunicación, nadie lo vio venir. Doscientas personas se agolparon en una taberna con la esperanza de estar a salvo, pero todas murieron. Otros se ahogaron al huir a un río cercano. Al día siguiente, los equipos de rescate enterraron a 350 personas en una fosa común al no poder identificar los cuerpos carbonizados. Un pueblo tras otro fue engullido hasta que se quemó un área de 4.850 kilómetros cuadrados, casi la mitad de la superficie de Jamaica. El infierno ardiente mató entre 1.500 y 2.000 personas, y destruyó aproximadamente 2.000 millones de árboles. A causa de la pérdida de vidas humanas, se considera que este fue el incendio más devastador de la historia de los Estados Unidos.

Durante los meses de sequía prolongada, los predicadores habían gritado que el fin del mundo estaba sobre todos ellos, que se arrepintieran porque el fuego del infierno estaba por llegar. Este mensaje hizo que muchos no buscaran refugio a tiempo para salvar sus vidas. Creyendo que era el fin del mundo, esperaron resignados su destino.

La venida de Cristo al mundo será sin previo aviso, al igual que los fuegos de Wisconsin. “Como en los días de Noé”, miles de personas en Wisconsin no se dieron cuenta del peligro hasta que fue demasiado tarde. Tú y yo sabemos que Jesús viene pronto. Asegurémonos de estar preparados para recibirlo.

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