Superamigo
“Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos” (Juan 15:13).
Al enterarse de que su amigo Jonah padecía una rara enfermedad hepática, Dylan Siegel, de seis años de edad, decidió escribir un libro. Puso en práctica su idea, ilustró su obra, y pidió ayuda a su madre para hacer copias y venderlas. El libro Chocolate Bar [Barra de chocolate] fue escrito y dibujado a mano. Las ventas ya han recaudado más de un millón de dólares, y todo se ha destinado al estudio de la enfermedad de Jonah.
¿Alguna vez has hecho algo similar por alguien? Dylan hizo todo lo que estuvo a su alcance para ayudar a un amigo. Con solo seis años, el libro fue lo mejor que pudo hacer. Ni siquiera podía imaginarlo, pero su actitud sencilla ayudó a mejorar la vida de Jonah.
La mayoría de las veces, así es como sucede. Las pequeñas acciones pueden ser muy importantes para otras personas. Tal vez todo lo que tu amigo necesita es una sonrisa, un “Hola, ¿cómo estás?” o un gesto de cariño. No te cuesta nada, pero puede marcar una gran diferencia para él.
Dios sabía que necesitaba hacer algo por nosotros. Y lo hizo. Él dio a su Hijo para que muriera en la cruz en nuestro lugar. Esa fue la mayor muestra de amor que alguien pudo dar. Demostró que es nuestro Amigo, al entregar lo mejor que pudo para salvarnos. Sé su amigo también. Entrégale tu corazón. Ten la seguridad de que esto es lo mejor que puedes hacer.
