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¿Dinero en mano? ¡Atención!
«En casa del sabio hay riquezas y perfumes, pero el necio gasta todo lo que tiene» (Proverbios 21: 20).
GASTAR DINERO NO SIEMPRE ES SINÓNIMO DE SATISFACCIÓN. Un estudio analizó las finanzas personales de 968 jóvenes durante cinco años. Los resultados revelaron que quienes ahorran dinero y consumen menos tienen un mayor bienestar general, incluidos menos problemas psicológicos. Además, las estrategias de ahorro también mejoraron la satisfacción y la sensación de paz de los encuestados.
Las habilidades para gestionar el dinero deben cultivarse desde una edad temprana. He aquí algunos consejos que pueden ser útiles:
- Aprende a diferenciar lo que es necesario de lo que simplemente deseas tener.
- Regatea el precio, o compra en un bazar que tenga artículos con precios bajos o de segunda mano. Las páginas web y las ferias de trueque también pueden ser buenas alternativas.
- Ten en cuenta lo que dice el versículo de hoy: no gastes todo que te venga a la mano, sé prudente y ahorra siempre.
Actuar inteligentemente con el dinero puede garantizar no solo una reserva para alguna necesidad imprevista, sino una provisión para cumplir sueños que de otra manera no cumplirías. Escucha siempre el consejo de la Palabra de Dios y sé sabio con tus finanzas. ¡Ahorra!
¿Qué tal si hacemos una alcancía? Necesitarás un frasco de vidrio transparente con una boquilla ancha. Pega cinta adhesiva a lo largo del frasco simulando una división del mismo (de modo que esto sirva de ranura). Decora un lado del frasco, cubriendo todo el espacio visible. Puedes utilizar pintura o pegar recortes relacionados con lo que quieras hacer con el dinero ahorrado. Mantén uno de los lados transparente, para que puedas ver el dinero que se va juntando y te des cuenta de tu esfuerzo está dando sus frutos.
