Nombres
“Y le darán estos nombres: Admirable en sus planes, Dios invencible, Padre eterno, Príncipe de la paz” (Isaías 9:6).
En el mundo antiguo, la elección del nombre de una persona era muy valorada. En general, el padre de familia tenía esta responsabilidad. Era común repetir los nombres de familiares, dar nombres vinculados a la naturaleza (Débora significa “abeja”, por ejemplo), nombres de profetas, patriarcas y héroes de la Biblia, e incluso dar al niño un nombre relacionado con la circunstancia de su nacimiento. En todos los casos, el nombre se asociaba con la personalidad y la historia de esa persona. ¿Sabes quién eligió tu nombre? ¿Qué significa?
En la Biblia, a Jesús se le asignan más de cien nombres diferentes: Cordero de Dios (Juan 1:29); Pastor (Sal. 23:1); Padre (Isa. 63:16); los que leíste en el versículo de hoy y muchos otros. Cada uno de ellos tiene un significado especial, y se puede aplicar a las situaciones más diversas de la vida. Es por eso que puedes llamarlo en cualquier momento, en cualquier lugar y en cualquier situación que lo necesites. Te conoce tan bien, que incluso sabe tu nombre. En su Palabra está escrito: “Yo soy el Señor, el Dios de Israel, que te llama por tu nombre” (Isa. 45:3).
Cuando experimentes alguna dificultad, ten la certeza de que puedes invocar a Jesús y él responderá. También puedes escuchar hoy la voz de Dios llamándote por tu nombre y diciéndote cuánto te ama.