Domingo 14 de Agosto de 2022 | Matutina para Jóvenes | ¿Cuál casa prefieres?

Domingo 14 de Agosto de 2022 | Matutina para Jóvenes | ¿Cuál casa prefieres?

¿Cuál casa prefieres?

«Gran abundancia hay en casa del hombre honrado, pero al malvado no le aprovechan sus ganancias». Proverbios 15: 6

Andrés estuvo involucrado en el cultivo de drogas durante muchos años hasta que empezó a estudiar la Biblia y conoció el mensaje de salvación. Se hizo adventista junto a toda su familia y, a la semana siguiente, comenzó a reemplazar las plantas de coca por cultivos de aguacates, yuca, hortalizas, verduras y frutas. La comunidad entera se escandalizó, porque sabían que los promotores de los cultivos ilícitos no le permitirían hacer eso. El vecino más cercano, con quien Andrés había trabajado por muchos años, fue a visitarlo para tratar de convencerlo de desistir de esa decisión que había tomado y que ponía en peligro la vida de los habitantes de esa región. Le dijo que era una locura arrancar la coca para sembrar cualquier otra cosa. Trató de hacerlo razonar diciéndole que se empobrecería porque nadie compraría sus productos y que lo que daba dinero era lo que todos cultivaban.

—Piensa en la vida de tu familia y de todos nosotros, porque tu decisión desatará la ira de esa gente y te van a matar, no te atrevas a desafiarlos —dijo el vecino.

Andrés dijo que el Dios que ahora conocía se encargaría de protegerlo. Andrés y su familia se mantuvieron en su decisión a pesar de las amenazas. Su constancia y fe lo hicieron dueño de una hermosa finca de productos alimenticios variados. Aunque vendía poco, le alcanzaba para sufragar los gastos de su familia y para alimentarse. Lo más importante es que se sentían felices con Dios.

Una mañana, la vida de la comunidad dio un vuelco que nadie imaginaba. Comenzaron a llegar tropas del ejército, helicópteros, vehículos y toda clase de aparatos. Capturaron a los dueños de fincas cocaleras y los llevaron a la cárcel, destruyeron los laboratorios de procesamiento e iniciaron la erradicación de los cultivos. Solo la finca de Andrés se mantuvo en pie. La pobreza se dejó ver en la zona rápidamente. Ahora los productos de Andrés adquirieron mucho valor, llegando a convertirse en el hombre más próspero de la zona.

Lamentablemente hay muchas personas que subestiman la honradez. En nuestro mundo de hoy parece ser más bien un impedimento que una cualidad deseada, pero el Sabio dice en el ver­sícu­lo de hoy que en la casa del hombre honrado hay abundancia. Hoy @Dios te dice: «¿Deseas la verdadera abundancia? Trabaja con honradez y yo bendeciré tu trabajo».

Deja una respuesta