Paciencia china
“No es que el Señor se tarde en cumplir su promesa, como algunos suponen, sino que tiene paciencia con ustedes, pues no quiere que nadie muera, sino que todos se vuelvan a Dios” (2 Pedro 3:9, DHH).
¿Has escuchado alguna vez la frase “Esa persona tiene una paciencia china”? Se la usa con personas que demuestran tranquilidad en situaciones donde otras se cansarían y enojarían. Pero ¿por qué “china”? Si vamos al origen del dicho, comenzó entre personas “occidentales” (Europa, América, Australia, etc.), conocidas por ser más inquietas, activas e intolerantes que las personas de culturas orientales, y en especial de la cultura china, caracterizada por llevar un ritmo de vida diferente al occidental, y por poseer ceremonias típicas chinas, que para los occidentales son “interminables”.
Por ello, hoy en día cuando se dice que alguien tiene paciencia china, hace referencia a quien sabe esperar y respetar los tiempos de los demás sin perder la calma. Qué hermosa cualidad poseen los chinos, ¿no te parece? Mira estas frases de
“Palabras chinas de admonición sobre la tolerancia” de un autor chino anónimo:
“Si padre e hijo pueden tolerarse (tenerse paciencia mutua), se tratarán unos a otros con piedad filial y bondad paternal”.
“Si los hermanos pueden tolerarse, se tratarán unos a otros con justicia y sinceridad”.
“Si los amigos pueden tolerarse, su amistad será duradera”.
“Si el esposo y la esposa son tolerantes, su relación será armoniosa”.
La paciencia es una cualidad que embellece el carácter y hace que la relación con otras personas sea placentera. Es hermoso contar con padres, amigos o profesores que son pacientes. Qué lindo saber que alguien te espera, cuando tal vez otra persona en su lugar se hubiera enojado y cansado. Por ello, también debemos saber regalar nuestra paciencia a otros, para ser de bendición a quienes nos rodean.
Sin dudas, el ejemplo máximo de paciencia y tolerancia no son los chinos, sino nuestro buen Dios. Vuelve a leer el versículo para hoy. Piensa, si Dios tuviera la poca paciencia que tenemos algunos seres humanos, ¿quién se salvaría? ¡Bendito sea nuestro Señor por tenernos tanta paciencia! Agradécele hoy en oración por tenerte paciencia y pídele que te ayude a ti también a ser paciente con los demás.
Gabriela
