¡Alaba!
«¿Qué debo hacer entonces? Pues debo orar con el espíritu, pero también con el entendimiento. Debo cantar con el espíritu, pero también con el entendimiento» (1 Corintios 14:15).
UN ESTUDIO DEMOSTRÓ OUE EL HECHO DE CANTAR EN EL IDIOMA en el que se desea adquirir fluidez ayuda al aprendizaje de ese idioma. Los 66 voluntarios del experimento participaron en uno de |os tres métodos para aprender húngaro: hablar, hablar con ritmo o cantar. Los que cantaron obtuvieron resultados muy superiores a los de los otros grupos.
¿Qué tal si aplicas este experimento a tu vida espiritual y empiezas a alabar más a Dios? Si queremos aprender más sobre el cielo y ser como Jesús, debemos cantar sobre esto. Es importante no solo cantar, sino alabar con todo nuestro corazón y entendimiento. Muchas veces, alabamos a Dios de forma automática. No reflexionamos sobre lo que dice la letra del himno, no cantamos como una forma de adoración o de transformación personal. Nos limitamos a repetir estrofas memorizadas mientras nuestra mente está en otros asuntos. Aunque la alabanza es un instrumento utilizado por Dios para transformamos, sin el espíritu apropiado, no logrará su verdadero propósito.
Aprovecha los beneficos que puede aportar la verdadera alabanza. Canta no solo con tu voz, sino con tu corazón. A medida que alabes de verdad, la Palabra de Dios entrará en tu vida y tendrás fluidez para comunicar el amor de Dios por dondequiera que vayas.
¡Que tal si cantamos un himno de alabanza ahora mismo?