Orión
«Vi la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que bajaba del del cielo, de la presenda de Dios. Estaba arreglada como una novia vestida para su prometido» (Apocalipsis 21:2).
EXISTEN 88 CONSTELACIONES RECONOCIDAS POR LA UNIÓN Astronómica Intemacional. Todas ellas están compuestas por grupos de estrellas que parecen crear formas de animales, seres humanos u objetos diversos cuando se observan en el cielo. Algunas constelaciones son más fáciles de identificar, como la constelación de Orion. Se asemeja a la imagen de un guerrero o cazador en compañía de sus dos perros de caza, representados por las constelaciones Canis Maior y Canis Menor.
¿Qué te parece verla con tus propios ojos? Al ser una de las constelaciones más grandes que existen, es visible en prácticamente todas las regiones habitadas de la Tierra. Para encontrarla, basta con buscar tres estrellas en hilera, conocidas como las «Tres Marías». Forman el cinturón de Orión. Cerca de ellas, pueden verse cuatro estrellas brillantes, dos arriba y dos abajo, formando una figura que se asemeja a las alas de una mariposa.
Sobre Orión, Elena G. de White describió: «El 16 de diciembre de 1848, el Señor me dio una visión. […] La atmósfera se partió, arrollándose hacia atrás, y entonces pudimos ver en Orión un espacio abierto de donde salió la voz de Dios. Por aquel espacio abierto descenderá la santa ciudad de Dios» (Primeros escritos, cap. 5, p. 63). No es casualidad que una de las estrellas pertenecientes a la constelación de Orión se llame «Betelgeuse». En hebreo,su nombre significa «portal de la casa de Dios».
Al igual que el apóstol Juan, Elena G. de White vio la Ciudad Santa descender del cielo. Un día, todos nosotros veremos también ese momento. Aprovecha hoy la oportunidad para hacer una sincera oración mientras observas la constelación. ¡Pídele a Dios que te ayude a estar preparado para ese GRAN DÍA!