Superprotección
“Nosotros confiamos en el Señor; ¡él nos ayuda y nos protege!” (Salmo 33:20).
Todo el mundo le tiene miedo a algo. No importa la edad que tengamos, es común sentirse inseguro en algunos lugares y frente a algunas situaciones. Por otro lado, también es posible que algunas personas nos traigan mucha paz y seguridad.
¿Alguna vez has estado cerca de alguien que hace que tu miedo desaparezca? Piensa un momento y responde:
Me siento protegido cerca de
Me siento más tranquilo cuando escucho
Una ocasión en la que me sentí protegido fue
¡Qué bueno es recordar que no estamos solos para enfrentar nuestros miedos y problemas! Además de las personas que recordaste, hay Uno que nunca estará lejos de ti: Dios. La Biblia está llena de historias que muestran cómo protegió a su pueblo: Jonás en el vientre del gran pez, Daniel en el foso de los leones, y los jóvenes en el horno son solo algunos ejemplos de la protección divina. Como lo hizo en el pasado, continúa haciéndolo en el presente. Puedes descansar en los brazos de Dios y sentirte ciento por ciento seguro con él.
Para nunca olvidar esto, escribe en los bordes de esta página: ¡Estoy a salvo con Dios!