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«Esta es la historia de Noé. Noé era un hombre justo e íntegro entre su gente, y anduvo fielmente con Dios» (Génesis 6:9).
La historia de Noé, en la Biblia, es un recordatorio de cómo un individuo justo puede permanecer fiel a Dios en medio de un mundo corrompido. En este nuevo día, analizaremos la vida de Noé y su relación con Dios, así como su valiente obediencia al construir el arca. La historia de Noé nos enseña la importancia de caminar con Dios, ser fieles a sus caminos y ser luz en un mundo que a menudo se aparta de la verdad.
Noé vivió en una época en la que la maldad y la corrupción llenaban la Tierra. Sin embargo, la Biblia lo describe como un «hombre justo», «íntegro entre su gente». Dios eligió a Noé para llevar a cabo una tarea extraordinaria: construir un arca donde quienes confiaran en Dios podrían salvarse del diluvio que destruiría la Tierra.
La obediencia de Noé a Dios fue notable. A pesar de las burlas y la incredulidad de los demás, Noé siguió adelante con la construcción del arca y obedeció las instrucciones divinas al pie de la letra. La historia de Noé presenta un poderoso ejemplo para los adolescentes que enfrentan la presión de conformarse con un mundo que a menudo se aleja de los valores y los principios cristianos. Al igual que Noé, podemos ser justos e íntegros al mantener una relación cercana con Dios y ser obedientes a sus mandatos, incluso cuando otros pueden burlarse o no entender nuestras elecciones.
Sigamos el ejemplo de Noé; seamos justos, obedientes y valientes en nuestra fe.
Oración: Querido Dios, ayúdame a ser como Noé, a caminar contigo en un mundo a menudo corrupto y a mantenerme fiel a tus caminos. Amén.
