El poder de las compañías
“No se dejen engañar: ‘Las malas compañías corrompen las buenas costumbres’ ” (1 Corintios 15:33).
Hace algunos años, en una escuela secundaria, había un grupo de amigos llamado “Los elegidos”. Eran conocidos por ser modelos de comportamiento, con buenas notas y valores sólidos. Pero un día, un nuevo estudiante llamado Robert se unió al grupo. Él tenía amistades que no compartían los mismos valores que “Los elegidos”.
Pronto, Robert comenzó a traer a sus amigos a las reuniones del grupo. Estos nuevos amigos tenían un estilo de vida completamente diferente: faltaban a clases, se metían en problemas y experimentaban con cosas peligrosas. Poco a poco, los comportamientos negativos comenzaron a influir en “Los elegidos”. Las buenas costumbres que habían mantenido comenzaron a corromperse.
La líder del grupo, Julia, finalmente se dio cuenta del problema. Convocó una reunión y habló abiertamente sobre cómo las malas compañías habían afectado el comportamiento y los valores del grupo. Juntos decidieron tomar medidas para alejarse de esas influencias negativas y volver a sus valores fundamentales.
Con el tiempo, “Los elegidos” se recuperaron y volvieron a ser un grupo de amigos con buenas costumbres. Aprendieron una lección valiosa sobre cómo las compañías pueden influir en nuestra vida y se comprometieron a elegir amigos que compartieran sus valores y los hicieran crecer en lugar de corromperlos.
¿Has experimentado alguna vez cómo las amistades pueden influir en tu comportamiento y en tus decisiones? ¿Cómo puedes tomar decisiones sabias sobre las compañías que mantienes en tu vida?
En 1 Corintios 15:33 leemos una advertencia sobre el poder de las compañías. Las personas con las que pasamos tiempo pueden tener un impacto significativo en nuestras elecciones y valores. Si bien es importante ser amable con todos, también es sabio elegir amigos que compartan tus valores y te ayuden a crecer en la dirección correcta.
Oración: Señor, ayúdame a ser sabio en mis amistades y elegir compañías que me ayuden a crecer en virtud y amor.
