Matutina para Menores | Domingo 24 de Septiembre de 2023 | Una profecía extraordinaria

Matutina para Menores | Domingo 24 de Septiembre de 2023 | Una profecía extraordinaria

Una profecía extraordinaria

“Su Majestad se hallaba en su cama; se puso a pensar en lo que va a pasar en el futuro, y el que revela los misterios se lo ha dado a conocer” (Daniel 2:29).

El rey vio una enorme estatua con cabeza de oro, y ese metal representaba su reino. Del año 605 al 539 a.C., este Imperio tuvo el control del mundo. Nabucodonosor reinó durante 43 de los 66 años de existencia del Imperio Babilónico. En ese tiempo Babilonia tuvo su máximo esplendor. Sin embargo, pronto surgiría un nuevo Imperio.

El Imperio Medo-Persa, el siguiente, estaba representado por la plata. Del año 539 al 331 a.C., este Imperio tuvo el control del mundo. Ciro fue el instrumento que Dios usó para levantarlo. Cien años antes de que Ciro naciera, Dios lo mencionó por nombre: “El Señor consagró a Ciro como rey, lo tomó de la mano para que dominara las naciones y desarmara a los reyes” (Isa. 45:1). Con estas palabras se anticipa la trágica caída de Babilonia.

Un tercer Imperio se levantaría después, simbolizado por el bronce. Del año 331 al 168 a.C., Grecia tendría el control del mundo. Alejandro el Grande fue su máximo representante, y extendió los límites del reino hasta la India y Persia. Su cultura y su idioma llegó a todo rincón del Imperio; y su influencia llega hasta el presente.

El Imperio Romano fue el que siguió, simbolizado por el hierro. Su dominio mundial se prolongó desde el año 168 a.C. al 476 d.C. A través de la guerra y la fuerza fueron conquistando territorios para convertirse en el Imperio más grande geográficamente, así como en cantidad de años de dominio. Jesús desarrolló su ministerio en los tiempos de este Imperio.

Después del 476 d.C. habría una división. De los mismos territorios que ocupaba el Imperio Romano surgirían las naciones europeas. Esto se representa con los pies, una combinación de hierro y barro que no puede mezclarse. Estas naciones trataron de aliarse varias veces, pero la profecía menciona que esto no ocurriría y todo intento sería en vano.

Todo se cumplió al pie de la letra. ¡Dios es confiable!

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