La bardana y las malas costumbres
“Dios, quien comenzó la buena obra en ustedes, la continuará hasta que quede completamente terminada” Filipenses 1:6, NTV.
¿Conoces una planta llamada bardana? Si no la conoces, busca una imagen en una enciclopedia o en internet (con la ayuda de un adulto).
Hoy vamos a conocer algunas características interesantes de esta planta. ¿Estás listo?
Las largas y gordas hojas de la bardana crecen desde el tallo en todas direcciones, cubriendo y ahogando a todas las plantas cercanas. Las plantas de su alrededor no reciben suficiente luz solar cuando crecen demasiado cerca de la bardana, y pronto mueren.
Las bardanas también tienen una forma especial de esparcir sus semillas. Se forman en bolas gordas, redondas y espinosas. Cada semilla tiene pequeñas púas o ganchos que se agarran a cualquier cosa o persona que pase. Una persona puede transportarlas a dondequiera que vaya sin darse cuenta. De esta manera, la bardana crece en muchos lugares.
Al igual que las semillas de bardana, las malas costumbres también tienen una forma curiosa de propagarse. Cuando nos acercamos, se enganchan a nosotros y van adonde vayamos. Pero, al igual que las semillas de bardana, las podemos apartar de nuestra vida para que no tengamos que cargar con ellas nunca más. ¿Hay algún mal hábito molesto en tu vida del que necesitas deshacerte? Pídele hoy a Jesús que te ayude.
Vicki