Señales
“¿…Qué señal habrá de tu venida…?” (Mateo 24:3, RVR 95).
Si un grupo de gente escuchase la palabra “señales”, vendrían a su mente diferentes pensamientos. Un enamorado afirmará: “Ella da señales de que le gusto”. Un conductor remitirá a las señales de tránsito y lo necesarias que son para evitar un caos automovilístico. Muchas personas también perciben en su rostro señales de envejecimiento. Antaño los indígenas hacían señales de humo para comunicarse con otras tribus distantes.
El diccionario define señal como “el medio que informa, avisa o advierte de algo”. Jesús habló de que habría señales en el tiempo del fin, antes de su segunda venida, y de cómo deberíamos estar preparados.
¿Qué sucesos estamos viendo que fueron anunciados en la Biblia para el tiempo del fin? ¿Cómo sería la gente en los últimos días? ¿Predijo la Biblia cosas buenas para el tiempo del fin? La Biblia predijo a través del apóstol Pablo que la sociedad estaría marcada por profundos cambios. En 2 Timoteo 3:1 al 5 leemos que en los últimos días se presentarán tiempos críticos, difíciles de manejar. La gente será egocéntrica: se amará a sí misma y no pensará en los demás. Amarán el dinero, no obedecerán a sus padres y serán desleales. No sabrán dominarse y serán agresivos. Amarán los deleites más que a Dios.
Mateo describe, en el capítulo 24, las señales de la Segunda Venida. Cuando los discípulos le preguntaron a Jesús qué señales habría del fin, él las explicó detalladamente: “Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: ‘Yo soy el Cristo’, y engañarán a muchos. Ustedes oirán de guerras y de rumores de guerras, pero procuren no alarmarse. […] Habrá hambres y terremotos por todas partes. […] Pero, en cuanto al día y la hora, nadie lo sabe, ni siquiera los ángeles en el cielo, ni el Hijo, sino solo el Padre. […] Por eso también ustedes deben estar preparados, porque el Hijo del hombre vendrá cuando menos lo esperen”.
Y a continuación Jesús describe dos grupos: cabras y ovejas. Las primeras son muy ágiles, independientes y muy curiosas. Pueden sobrevivir perfectamente en libertad, sin necesidad de pastor. En cambio, una oveja separada de su rebaño estará muy agitada y nerviosa, y como consecuencia puede llegar a morir. Necesita un pastor.
Espiritualmente hablando, ¿somos como ovejas o cabras? Estemos en el grupo de la derecha para recibir la aprobación de Jesús. Hay muchas señales más, así que mantente atento, persevera… ¡su Venida está cercana!
Mirta