Pierogi
“Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia, porque serán satisfechos” (Mat. 5:6)
Mientras redactaba este libro, el algoritmo de YouTube me sugirió un canal titulado “Scammer Payback” (Revancha contra estafadores), dirigido por un experto en ciberseguridad apodado Pierogi, en referencia al plato típico de Europa del Este y parte de Asia. Pierogi se dedica a llamar a estafadores telefónicos, generalmente ubicados en India, y simula ser una ancianita. Cuando el estafador intenta acceder a la computadora de Pierogi, él responde con un contraataque cibernético, ingresando al sistema del estafador, descargando todos sus archivos y eliminándolos. Por lo general, sus videos concluyen con los estafadores expresando maldiciones y llantos.
En ciertos casos, Pierogi se convierte en un Robin Hood y sustrae dinero de los estafadores. Sin embargo, lo que más me impactó de las proezas de este experto es que, tras ajustar cuentas con los estafadores y, en algunos casos, denunciar sus ubicaciones y colaborar con las autoridades para desmantelar los centros de llamadas fraudulentas, Pierogi se dedica a contactar a las víctimas. Les ofrece orientación para proteger sus datos y, en ocasiones, logra que recuperen el dinero que les habían estafado.
¿Por qué este tipo de video resulta tan llamativo? Creo que todos podemos empatizar con las personas que han caído en las garras del engaño; pero también creo que es nuestro sentido interno de justicia lo que hace que una conducta como la de Pierogi nos resulte interesante. Queremos que se haga justicia en el mundo, incluso si es por medio de un video de YouTube.
Desear la justicia es un indicio de que Cristo ha influido en nuestro corazón. En el Sermón del Monte, el Maestro dijo que aquellos que tienen “hambre y sed de justicia” son bienaventurados, y que su deseo será saciado. En la actualidad, ese anhelo del corazón solo puede ser satisfecho mediante la presencia de Jesucristo, el Justo (ver 1 Juan 2:1). Cuando él regrese por segunda vez, dará a cada uno “conforme a lo que haya hecho” (Apoc. 22:12), y en ese momento prevalecerá la justicia en todo el universo.
