¿Qué hará Dios con nuestras lágrimas cuando Jesús vuelva?
“Secará todas las lágrimas de ellos, y ya no habrá muerte, ni llanto, ni lamento, ni dolor” (Apocalipsis 21:4).
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- Las secará.
- Las humedecerá.
- Las reproducirá.
¿Te has preguntado de dónde salen las lágrimas?
Justo debajo de tus párpados se encuentran las glándulas lagrimales, cuya función es la de producir lágrimas. Las lágrimas están compuestas por agua, cloruro de sodio (sal, por eso saben a sal) y albúmina (una proteína que también tenemos en la sangre).
La primera función de las lágrimas es mantener el ojo limpio y húmedo para que veas bien y expulsar el polvo o las impurezas que a veces entran en el ojo con el viento. A veces, las lágrimas surgen espontáneamente porque estamos cerca de sustancias irritantes como la cebolla, ciertos gases, vapores, luces brillantes o por comer algo muy picante. Estas lágrimas tratan de lavar el ojo y mantenerlo sano.
Pero hay otro tipo de lágrimas que no surgen para limpiar nuestros ojos y mantenerlos hidratados. Son las que producimos cuando sentimos tristeza o cuando nos reímos mucho. ¿Por qué se producen estas lágrimas? Según parece, su función es hacernos sentir mejor. Estas lágrimas contienen unas hormonas que actúan como un medicamento natural, es decir, se producen para calmar nuestro miedo, nuestra ira, nuestra tristeza o para desestresarnos cuando nos reímos mucho. Las lágrimas son una señal de que el cuerpo vuelve a la normalidad (los músculos se relajan y el corazón se desacelera) después de grandes emociones tristes o felices.
Dios dice, en el último libro de la Biblia, que en la Tierra Nueva nos secará las lágrimas. ¿Qué tipo de lágrimas, de las que hemos hablado, será las que Dios nos secará cuando Jesús vuelva? Lee el versículo de hoy y recuerda que Dios siempre quiere que seas feliz.
Dibuja una lágrima en tu Diario de Oración y copia el versículo de hoy.
