Decisiones sabias, consecuencias felices
“Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie” (Santiago 1:5, NVI).
¿Qué fue lo primero que hiciste al levantarte esta mañana? Ya sé, quizás elegiste entre levantarte enseguida o seguir durmiendo… ¿O será que decidiste doblar tus rodillas para dar gracias a Dios por el nuevo día? Las decisiones pueden ser así de simples, o tornarse más complicadas.
Una tarde, Ricardo Responsable se comprometió con su mamá a ordenar sus juguetes. Mientras ordenaba escuchó un ruido y se asomó a la ventana. Su amigo José Juguetón hacía rebotar la pelota y, al verlo, lo invitó con mucha insistencia para que se uniera al juego. ¿Qué hará Ricardo ahora? ¿Ordenar sus juguetes o salir a jugar con José? ¡Ayudemos a Ricardo a tomar una decisión! ¿Qué debería hacer? ¿Qué harías tú en su lugar?
Hay muchas cosas que aprenderás en tu vida, pero aprender a tomar buenas decisiones es una de las más importantes. ¡La vida está llena de decisiones! Dios es quien te da la sabiduría para tomar la decisión correcta, pero el que decide eres tú. La capacidad para tomar decisiones es la que te hace diferente a los demás seres vivos. Dios te da la libertad de elegir, que no se la dio ni a los animales ni a las plantas; pero esa libertad está ligada a la responsabilidad. Toda decisión produce una acción y todas las acciones tienen consecuencias.
Ser responsable es tomar la decisión correcta. Es cumplir con tus compromisos. Ricardo Responsable no necesitaba que sus padres le dijeran lo que tenía que hacer, porque había aprendido a ser responsable y a pedir sabiduría a Dios para tomar decisiones correctas. Su decisión resultó en una consecuencia feliz, porque luego de cumplir con su compromiso de ordenar sus juguetes, la mamá le dio permiso para salir a jugar.
Quizás el ponerte en el lugar de Ricardo Responsable algunas veces no sea tan fácil, pero el versículo de hoy nos recuerda que “si te falta sabiduría, puedes pedírsela a Dios, y él te la dará generosamente”.
¿Quieres tener consecuencias felices en tu vida? Pide sabiduría a Dios para hacer la mejor elección.
Magaly
