Miércoles 04 de Mayo de 2022 | Matutina para Menores | No cedas a la tentación, ¡obedece!

No cedas a la tentación, ¡obedece!

“Y le dio este mandato: ‘Puedes comer de todos los árboles del jardín, pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no deberás comer. El día que de él comas, ciertamente morirás’ ” (Génesis 2:16, 17, NVI).

¿Tentación? ¿Qué significa eso? Es el deseo de hacer algo que sabes que no es correcto. Comer un pedazo de pastel no es pecado, pero sí lo es cuando te dijeron que no lo hagas. Lee la siguiente historia.

–Mmmmm… ¡Qué buenas galletas con chispas de chocolate! –dijo Carlitos al entrar por la puerta de la cocina después de la escuela.

Su mamá colocaba galletas recién horneadas en un plato y le dijo:

–No puedes comerlas todavía, podrás hacerlo después del almuerzo.

–Está bien –dijo Carlitos, no muy convencido.

Pero ese olor era tan agradable que, cuando la mamá salió al patio a sacar la basura, sin pensarlo mucho, él estiró la mano y tomó una galleta. Y así tomó la tercera, la cuarta y la quinta galleta… Finalmente, cuando estaba por terminarse la última galleta, la mamá lo llamó:

–¡Carlitos, el almuerzo está servido!

Carlitos tragó el último pedazo que ya tenía en la boca, y se limpió las migas para no ser descubierto. Sin embargo, cuando llegó a la mesa, la mamá ya sabía de su desobediencia, pero no dijo nada. Le puso un gran plato de comida delante y, después de que el papá hizo la oración, empezaron a comer.

Carlitos intentó comer, pero algo no andaba bien.

–¿Te pasa algo, Carlitos? –preguntó la mamá.

–No tengo mucha hambre y me duele la barriga –dijo él.

–Me desobedeciste y te comiste las galletas calientes antes del almuerzo, ¿verdad? –afirmó la mamá–. Pues ahora tendrás que pagar las tristes consecuencias de tu desobediencia.

¿Te suena familiar esta historia? Al principio de la historia humana, Dios les dio un mandato a Adán y Eva, pero ellos cedieron a la tentación, comieron del fruto prohibido y su desobediencia tuvo consecuencias trágicas.

Dios, que todo lo ve, sabe lo que es mejor para nosotros. Tus padres saben lo que es mejor para ti, y créeme, tampoco puedes ocultarles todo. Mejor, ¡no cedas a la tentación! ¡Obedece!

Magaly

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